Estoy en Bogotá, alojada en el hotel “Casa rústica Bogotá” donde realizo un lindo
trabajo de jardinería a modo de trueque por hospedaje en el lugar. El espacio está a cargo de Peter Preminger, un
interesante personaje del barrio Quinta Camacho (zona financiera de Bogotá)
quien dedica parte de su tiempo al reciclaje y reutilización de objetos, diría
como forma de vida. Y en la acción se basan las ideas. .
Peter y los invitados. www.casarusticabogota.com |
Parte de mi trabajo aquí fue recuperar plantas, reorganizar
el jardín y armar un huerto orgánico ,
tanto vertical como en canteros.
Utilizando método de riego por
recolección de agua de lluvia que aquí mismo voy aprendiendo. También me puse a recolectar esquejes por la
ciudad para armar nuevas macetas (realizadas con botellas de plástico, macetas
reutilizables, baldes , retretes que ahora son macetas) todas ellas
recolectadas por la labor de reciclaje del señor Peter. Trabajo que publicaré
en una nueva entrada.
Pero, lo que aquí me corresponde es contarles un poquito
sobre el taller de cultivo autosustentable que llevamos a cabo en el contexto
de la FAD (feria alternativa de diseño) que se realiza el último domingo de
cada mes y cuenta con la participación de artistas plásticos del Art Recó de
Bogotá.
Casa Rustica invitó a los niños de la escuela Porfirio Barba
Jacob a participar y conocer de su
“museo de oportunidades” , a dar una charla sobre reciclaje y reutilización
mostrando las instalaciones del hotel y
como parte de la actividad que aquí se realiza, a participar del armado de
compostaje urbano (donde se interviene
un espacio público –la vereda- y se realizan un pozo de compost) . La parte que
a mí me toco junto a Peter fue explicar el proceso teórico de un compostero
urbano para los niños y dar un taller de cultivo que yo llamo autosustentable.
Diseñé la metodología de este taller orientadome desde el concepto de ECOPEDAGOGIA (desde la epistemología
de Paulo Freire). Cuando emprendí este viaje, además de hacer música, emplacé mi mochila al conocimiento y cultivo de la
tierra. En Uruguay estuve dando talleres de cultivo de cannabis para adultos y en Buenos Aires talleres individuales de cultivo
autosustentable a todo público. Pero nunca me había tocado trabajar con niños
tan pequeños, una experiencia enriquecedora. Estoy muy contenta porque recibimos a los
niños del colegio Porfirio Barba Jacob, quien debe su nombre al ilustre poeta
colombiano y en cuya obra se encuentra un reconocido poema titulado “Parábola
del retorno” en el cual describe con
mucha riqueza literaria el avance de la civilización de cemento y la industria, sobre la ciudad de Bogotá. Quien además
también fue un gran viajero de la América Latina.
¿Por qué dar un taller de cultivo AUTOSUSTENTABLE?
Porque
aprendiendo a compostar, armar un
sustrato, germinadores, abonos y pesticidas orgánicos y utilizando embases de materiales “descartables”, podemos generar
la continuidad de un método de
cultivo donde el dinero interviene en menos del cinco por ciento del proceso. Y
además hacer un ciclo circular donde el cultivo puede autogenerarse. Si
accedemos a semillas orgánicas por intercambio y recolección, lo mismo con las
plantas ornamentales, generamos el menor
grado de intervención del dinero, generamos recursos propios y podemos darle
continuidad en el tiempo a cualquier proyecto de cultivo.
Paso a describir de que se trató el taller, ya que seguro
los papás de los niños van a visitar este blog, con fines educativos. Demás
agradecida estoy con todos ellos y el señor Peter que me dio la posibilidad de
dar el taller.
1-
Vimos como se realiza un compostero urbano en un
cantero de vereda. Cómo es el proceso de recolección de materia orgánica para
su descomposición. Cómo y en qué tiempo (de cuatro a seis meses) podemos pasar
el compost al segundo sector (compost
secundario). Qué precauciones teníamos
que tomar (remover la tierra por los gases, tapar por los olores que desprenden
los mismos, fumigar con pesticida orgánico para evitar la presencia de moscas
en una zona pública) y además se pudieron ver las bases de un futuro banco de
madera para que los vecinos se sienten,
vislumbrando un espacio cuya funcionalidad es doble. Una labor ecológica
y otra social.
En el mismo espacio los chicos apreciaron
los tachos de basura cuya funcionalidad (además de ser objetos recó
intervenidos por artistas de la zona) es cumplir con su propio fin, realizados
con bocas angostas que evitan que se coloquen bolsas de residuos enteras y así “generar
una cultura que comprenda donde vota la basura”; Señaló
Peter.
2-
Luego de
comprender el proceso de descomposición de materia orgánica pasamos al taller
de cultivo autosustentable. Los materiales presentes fueron un balde, vasos de
igopor y plástico reciclados, purín de
ortiga y ortiga seca, jugo de brotes y brotes, pesticida orgánico a base de ají,
ajo y tabaco orgánico, cajas de huevos
para hacer germinadores , semillas, turba de arroz , fibra de coco y compost,
una mata en mal estado (con la que ejemplificamos cómo se hacer para
recuperarla) y objetos para manipular
tierra. (palustre, etc)
3-
Explique a los niños el concepto de
autosustentabilidad, luego de participar del compostaje , comprendían de dónde sacábamos
la tierra que usaríamos para el Sustrato.
Expliqué de qué se trata el
sustrato. No sin antes preguntar a ellos
sobre lo que estábamos tocando. La idea fue que ellos mismos manipulen e interactúen alrededor de lo que aprendían,
que saquen sus conclusiones de lo que veían con conocimientos previos que
traían de sus hogares y escuela y sumen conocimientos nuevos, resultando en que
sacaron sus propias conclusiones. Pudieron interactuar tocando,
preguntando y respondiendo ellos mismos, mi intervención en el taller fue la justa para
explicar el proceso sencillo de obtención de materiales de jardinería en pocos
pasos, en forma sencilla, explicando los porcentajes para diluir, armar
sustrato y hacer tés orgánicos a modo de “ proporción visual” en tamaños.
Explicando que productos orgánicos teníamos,
les mostraba un objeto reciclado, como
una botella, bolsas y vasos para que utilicen en el método.
Me emocioné cuando al final del taller todos querían
semillas. Desde un motivo personal y por ellos subjetivo expliqué a los niños
lo que sucede actualmente con las semillas transgénicas, con la idea de generar
conciencia, donde ellos actuaran como sujetos activos, fueron “los
guardianes de las semillas”. Y así se sintieron. Cada carita me lo
decía. Oriente el taller a pensar el
cultivo desde la naturaleza humana en equidad con las plantas.
Explicando el proceso de nacimiento de una semilla, casi con las mismas
cualidades de necesidades humanas para crecer. Alimento, agua. Es simple explicar a los niños y a su vez
complejo. Es fácil porque ellos son muy inteligentes, todavía no están
apagados. Lo difícil es bajar a un lenguaje no tan técnico sobre los métodos.
Lo cierto es que ellos pudieron incorporar palabras nuevas ; Compostaje, reciclado, reutilización,
germinador, transgénicos, tés orgánicos, sustrato, abonos, pesticidas, plagas,
entre otras. Y mediante juegos comprendieron la responsabilidad de la labor de
cultivo y lo fácil que es autogenerar una dinámica de cultivo en sus casas,
junto a su familia con la que compartieron el taller.
Este domingo 5 de Octubre, un nuevo contingente de alumnos y
vecinos nos esperan para otro nuevo
paseo por Casa Rústica y taller de cultivo autosustentable.
Geniaaaaa me encanta lo que haces y además la forma en que lo cuentas. Se nota que le pones mucha pasión. Que tu constelación siga brillando y que algún día nos encontremos encontrándonos amiga!
ResponderBorrarSe te quiere por estos lares, ya lo sabes.
Por acá también se te quiere y lleva en el corazón a todas partes. =) GRACIAS querido, El universo nos constelará ruteando ...
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